Durante más de 30 años fue la residencia de verano de uno de los grandes nombres de la commedia all’italiana, el actor, director y guionista Alberto Sordi y es una de las villas más bellas de la Costa de los Etruscos.
Fue construida en el siglo XIX por el barón Lazzaro Patrone para el pintor Vittorio Corcos; Sordi la compró a la hija del artista, y la revendió a un empresario toscano antes de su muerte, en el 2003. Los nuevos propietarios dejaron intacto el estudio del actor y del pintor Corcos.
Sordi no tenía una vida mundana y raramente salía de su casa, a diferencia de otros actores y directores de la época de oro del cine italiano que como él habían elegido Castiglioncello como un buen retiro: Mastroianni, Vittorio Gassman, Suso Cecchi d’Amico, Bice Valori y Paolo Panelli, Gillo Pontecorvo...
En Castiglioncello, un pueblo que se remonta al siglo IV a.C y que domina una pequeña península al final de los montes livorneses, Dino Riso rodó su obra maestra Il Sorpasso, con Gassman y Jean Louis Trintignant, en 1962, que originalmente debía ser interpretada por Alberto Sordi.
Fue Gassman quien convenció a Risi de elegir Castiglioncello, donde pasaba las vacaciones con su familia, como lugar para grabar la película. Una joven Sophia Loren también rodó allí uno de sus primeros filmes, Pellegrini d’amore (1953). Ahora la residencia de Sordi sale al mercado en busca de millonarios amantes de la Toscana.
VILLA CORCOS
CASTIGLIONCELLO, LIVORNO (ITALIA)
SUPERFICIE 1.178 M², CON SEIS HABITACIONES Y CINCO BAÑOS. DOS VIVIENDAS AUXILIARES DE 90 M² CON SENDOS DORMITORIOS
JARDÍN 4.055 M², CON PISCINA DE AGUA SALADA
PRECIO UNOS 15 MILLONES DE EUROS
