Podría decirse que el Škoda Kodiaq combina lo mejor de dos mundos. Por una parte, ofrece un espacio interior comparable al de modelos lujosos de talla grande y pretende seducir a los usuarios típicos de monovolumen. Pero por otro lado, no hay que ser millonario para adquirir el polivalente modelo de la firma checa, puesto que sus tarifas de venta se han mantenido en unos niveles asequibles para muchas familias.
Škoda ha creado un coche cargado de ingeniosos complementos destinados a solventar inconvenientes de la vida diaria
Fiel a su devoción por las soluciones inteligentes y simples, Škoda ha creado un coche cargado de ingeniosos complementos destinados a solventar inconvenientes de la vida diaria. El Kodiaq esconde un paraguas en cada una de las puertas delanteras, además de contar con una práctica rasqueta para eliminar el hielo de los cristales que se guarda en la tapa del depósito. Pero lo mejor son unos apéndices plásticos que aparecen al abrir las puertas y que evitan daños cuando se aparca en batería.
En movimiento, este flamante SUV destaca por sus altas cotas de confort y por la impecable sensación de aplomo a la carretera que transmite al conductor. Por el mismo precio, el cliente puede elegir un coche equipado con cambio secuencial DSG o tracción 4x4. Pero si se dispone de dos mil euros extra, lo mejor es optar por la versión que monta ambos mecanismos.
ŠKODA KODIAQ 2.0 TDI AMBITION
motor
Cuatro cilindros. Turbodiésel
potencia
150 CV
emisiones de CO2
131 g/km
consumo medio
5,3 l
velocidad máxima
197 km/h
LARGO/ANCHO/ALTO
469/188/165 cm
MALETERO
720 l
precio
33.390 €