El banco

Si la semana pasada les escribía sobre el piso que estamos pensando en adquirir, esta semana comparto con ustedes (perdónenme si, como alguno de ustedes me ha insinuado de forma educada, parece una columna de confesiones) la experiencia en los bancos.

Nada que ustedes no sepan, seguro, pero yo, que soy más cazurro de lo que a veces pienso, estaba convencido de que la visita al banco sería una reunión de iguales, en la que la compra de dinero sería eso mismo, una compra.

Yo entiendo que la banca es un negocio, que poner nuestro dinero en el banco es más cómodo que tenerlo en casa, y que con ellos podemos pedir préstamos e hipotecas que ayudan a planificar, demostrar y exagerar lo que somos o nos gustaría ser.

Para lo que yo no estaba preparado es para la prepotencia y el total desinterés. No mencionaré el banco porque quiero pensar que fue una excepción, pero pocas veces en mi vida he abandonado un sitio sintiéndome tan asqueado y menospreciado. Después de 25 años siendo cliente del banco, teniendo ahí ahorros personales, la hipoteca de mi piso actual y la gestión de mi pequeña empresa, nada de eso importa, ya que su actitud se basa en “tráeme mejores ofertas de otros bancos para que yo te lo iguale o mejore”.

Sé que el mundo es así, pero hay veces que piensas que deberíamos rebelarnos de forma ordenada y pacífica. Deberíamos decir que no estamos de acuerdo con que el que juega con mi dinero para ganar más dinero me venda dinero a un precio marcado por lo que yo quiero pagar por mi dinero o lo que otros creen que mi dinero vale.

Uno sabe sobre el mundo en el que vive, pero no puede evitar pensar que después de tanto avance digital, tanto progreso e innovación en supermercados y concesionarios de coche, al final, cuando toca hablar de dinero contante y sonante, es como estar en un zoco en Marrakech. Regatea, eleva el tono, amenaza con irte, haz ver que no te interesa… todo para obtener un precio siendo consciente de que pagas más de lo que deberías. Y además, les haces gratis el estudio de la competencia.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...