El carrito de la compra

–Mira ahí. Los del carrito de delante, mira qué compra llevan.

–No seas curioso, que te van a ver. ¿Qué quieres que mire? Un poco de todo, como nosotros. Papel higiénico, papel de cocina, lejía, jabón de lavaplatos, comida, bebidas...

–Sí, claro. ¿Pero qué bebidas, qué comidas?

–...Bueno, leche, cerveza y bebidas carbónicas, refrescos... Bebidas azucaradas, ¿no? ¿Te refieres a eso?

–A eso. ¿Y qué comida llevan?

“Y tanta vitamina, con lo ricas que son las grasas saturadas y trans”

–Patatas. Naranjas. Huevos... Y platos preparados, comida precocinada. Ya veo por que lo dices. Eres malo...

–No, qué va. Veo lo que hay, lo que tienes ahí delante.

–También ellos pueden ver nuestro carro y decir, “mira esos gilipollas que llevan tanto vegetal y tanta verdurita”…

–“Y tanta vitamina, con lo ricas que son las grasas saturadas y trans y los refrescos azucarados…”. Lo cierto es que están obesos ambos, les salen los michelines fuera de la camiseta roja de la selección de fútbol. Probablemente eduquen a los hijos en la misma dieta y así sucesivamente.

–Chist. Te van a oír. ¿Y te das cuenta de que estás siendo clasista?

–¿Clasista, yo? ¿Porque constato lo que veo?

–Sí, esas personas seguramente no tuvieron la vida cómoda que tuviste tú…

–¿Yo vida cómoda? Ayudé a trabajar en la tienda de mi padre hasta que acabé la carrera…

–Ya, pero tienes carrera, una buena posición. Tus padres te dieron una educación, te enseñaron a comer... Pero seguramente estas personas no tuvieron esas oportunidades.

–Pero hay otras personas que tuvieron una vida semejante y sin embargo no compran y tragan todo lo que les mandan. No me digas que a estas alturas no sabe todo el mundo lo que es la obesidad y lo que supone esa alimentación.

–Pero la publicidad nos afecta a todos y es más fuerte que ellos. Y el sabor y las sustancias adictivas que llevan, el azúcar... Tú acabas de coger la marca de ginebra que ves anunciada por la tele, pero si te pongo una de marca blanca en el gin-tonic, ni te das cuenta…

–De eso nada.

–Te crees más listo y más fino, pero también tú eres socio de un club de fútbol porque os meten el fútbol por los ojos.

–No compares. ¿Me dices que también me manipulan a mí?

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...