Recuerdos de infancia

Una comedia, Incidencias, dos proyectos en el cine argentino y una larga gira teatral con la función ¡Atchuss!, basada en relatos cómicos del joven Chéjov, son las citas que resaltan en la agenda de Ernesto Alterio (Buenos Aires, 1970) para las próximas semanas. Para no estresarse “más de lo imprescindible”, se escapa en cuanto puede a la madrileña Casa de Campo, “al lado de mi casa”, para pasear en bici. “Es una afición muy completa. Te destensa y además haces ejercicio”. La ha retomado hace poco, “quizá influenciado por la moda, aunque siempre ha estado presente en mi vida. Cuando pienso en mí de niño me recuerdo montado en una”. Con dos candidaturas al Goya y un puñado de títulos incuestionables en una carrera de más de treinta películas, en su último filme encarna a un funcionario corrupto atrapado en un tren, en mitad de la nada y en plena Nochevieja, con un maletín lleno de dinero, un muerto, una mochila con sospechosos cables y un grupo de pasajeros y tripulantes al borde de un ataque de nervios. “Juan Cruz y José Corbacho, los directores, han querido pintar un fresco de lo peor de la sociedad actual, en clave de comedia. Espero sinceramente que las aristas de la situación no nos impidan recibirla, como mínimo, con una sonrisa”.