La escritura y la vida

Polifacético, hiperactivo, James Franco es una estrella atípica. Actor, director, escritor, su currículum impresiona. A sus 37 años, tiene 27 cintas dirigidas por él –entre filmes, cortos y documentales–; estudios de Literatura, Escritura, Cine, y dos libros. “¿Y si me muero mañana y esta es mi única vida?”, responde él, sobre su ingente productividad. Imposible distinguir entre aficiones y profesión; pero si algo destaca en él es su amor por la literatura, como ávido lector, adaptando al cine a clásicos como Faulkner o Steinbeck (In Dubious Battle, en rodaje) y como escritor. “Tengo dos grandes pasiones: la literatura y la interpretación, así que trato de unirlas. Al leer una novela veo imágenes, pongo voz y gestos a los personajes; los interpreto, imagino la película”. Su pasión por escribir se concretó en el 2010 con Palo Alto, un conjunto de relatos que recibió críticas positivas frente al recelo inicial que causaba su imagen de guapo actor metido a novelista. En el 2014 editó un libro de poesía, Directing Herbert White, algunos de cuyos versos dedica a actores fallecidos como Brando o Ledger. Ahora, el artista californiano tiene cuatro filmes por estrenar; el primero de los cuales, True Story, llegará en julio. Y para no perder un minuto ha iniciado ya la adaptación de la novela de William Gay The Long Home.