Un serial sobre gentes que vuelven del más allá arrasa en audiencias. ¿Vivir para ver?
(Risas) Es que la televisión ya no es lo que era. Se ve más en el ordenador, a la hora que cada uno elige... Hay que hacer productos a la altura y que huyan de lo convencional.
¿Qué le hace sentirse vivo?
Mi gente. Mi hijo, mi familia, mis amigos y mi trabajo.
Su vuelta al cine la marca El autor de Martín Cuenca, sobre novela de Javier Cercas… ¿Hay cosas a las que es imposible decir no?
Exacto. Por el director, el texto, el reparto, por rodar en Sevilla…
Es escalofriante lo osado que es este embrión de escritor al que encarna.
Manipula a las personas para crear situaciones que luego pueda llevar al papel, por aquello de “escribir sobre lo que se conoce bien”. Desgraciadamente, es fácil de entender hoy en día que alguien manipule a los demás. Todos lo hacemos en alguna medida.
¿Es la base de la desconfianza que nos invade?
Sin duda. Es una pena que hayamos perdido la inocencia y la capacidad de creer los unos en los otros con respeto y tranquilidad.
¿Estaba tan empeñado en ser actor como su personaje en ser novelista?
Soy muy vocacional. Cuando llegué a Madrid con 18 años era mi meta. El proceso está siendo maravilloso.
¿Qué le debe a Animalario?
Son mi familia y significaron un gran impulso en mi carrera y un honor como colectivo que ha redefinido el teatro español. Por su compromiso con el arte, pero también social.
¿Y a Águila Roja?
Cuando un personaje, como el Satur, llega con tal naturalidad a millones de personas pasa a formar parte de ti para siempre. Gracias a ese personaje noto el cariño de la gente.
¿Su papel más antipático?
Torquemada, para Assassin’s Creed, una superproducción que hice con Fassbender y Marion Cotillard. Casi digo que no; pero me hubiera perdido una experiencia brutal. Bueno, y también hice de Franco.
Ahora estrena la serie Vergüenza. ¿Qué le da pudor?
Hablar en público. Soy muy tímido. Por eso elegí ser actor. Para resguardarme tras el personaje.
Pensé que elegiría esa escena de El autor en la que se desnuda y pone los genitales sobre la mesa…
Eso sólo se puede hacer con un director en el que confíes al 100%. Pero ahí me protegía un personaje…
¿La noche o el día?
Soy ave nocturna. Si salgo, no pongo hora límite. Si me quedo en casa, veo películas, leo a David Trueba o a Irvine Walsh, García Márquez…
Un lugar al que le gustaría viajar y otro al que no volvería.
Estoy loco por conocer Costa Rica.
Y no sé si volvería a Malta.
Defina un momento perfecto.
Ese en el que estás en el sofá y se te cae el libro de las manos porque empieza la siesta de tu vida.°
¿Qué le enfada?
La impuntualidad Y la falta de educación. Pero me dura poco.
¿De qué disfruta?
De un buen arroz. Y de la comida en general. Me controlo mucho.