El otro lado: "Las películas tienen sentido; la vida, no"

Cineasta. Tigre y dragón, Sentido y sensibilidad, Brokeback mountain, La vida de Pi… el taiwanés Ang Lee es, a sus 64 años, uno de los cineastas más completos de la actualidad. Con dos Oscars en su haber, presenta Géminis, en la que el yo más joven de un exsicario (Will Smith) viaja desde el pasado para darle caza, y en la que ha aplicado tecnologías digitales nunca vistas.

Con su trayectoria, ¿qué le mantiene interesado en el cine?
No tengo una lista de cosas que deba hacer antes de retirarme porque tengo aún mucho que aprender. Estoy tranquilo cuando siento el vértigo de no saber qué viene a continuación. Cuando ya sé cómo hacer algo me empiezo a preocupar.

¿Siempre ha sido tan curioso?
En el cine, sí. Más que en el resto [risas]. Lo asocio con la vida y lo uso para descubrir el mundo y a mí mismo. Confío en él más que en la vida. Las películas tienen sentido. La vida no. Cuando descubrí el cine, pensé que podía crear algo hermoso.

Primero quiso ser actor...
Fui a Estados Unidos con esa intención, pero no logré ni un papel porque no dominaba bien el idioma. Fue muy frustrante. 

Y optó por ponerse tras la cámara. ¿Cómo dirige a los actores para que hablen tan bien de usted?
Conociéndolos. Recuerde que quise ser uno de ellos. Dirigir es más fácil que actuar o ser una estrella de rock, que también valoré. Al final encontré mis medios para crear sin estar en el centro del escenario pero soy una especie de actor que, en vez de darles la réplica, les susurra al oído.

Pocos actores habrían podido asumir el papel de Will Smith en su nueva película…
Necesitábamos una estrella actual que ya lo fuera hace 25 años, porque tendríamos imágenes de referencia para construir su yo más joven. Y que fuera además experto en acción.

¿Se han divertido?
Con Will es imposible no hacerlo. Fue a Taiwán a presentar un filme y gritó a las cámaras: “¡Ang Lee! ¿Dónde estás? ¡Me hago mayor y quiero trabajar contigo! ¡Te he perseguido hasta tu casa!” ¡Cómo no llamarle!

¿Cree que todos nos pelearíamos con nuestros yoes más jóvenes si vinieran a pedirnos cuentas?
Probablemente. ¿Querríamos escuchar sus reproches? ¿Querría aceptar nuestras explicaciones? Es un conflicto dramático apasionante.

¿Usted qué le diría al suyo?
No querría ni verlo. Si alguien lleva la misma camisa que yo, me enfado, qué decir de un clon más joven. No debemos arrepentirnos de lo que hacemos. Hay que vivir el momento.

En Génesis ha empleado lo último en tecnología digital…
Increíble: es como el paso del mudo al sonoro. Si haces una película con estos avances es imposible hacer cine tradicional de nuevo. Y sólo estamos arañando la superficie.

¿Es de los que ve sus filmes como hijos y dice no preferir ninguno?
Cierto. Pero de ésta estoy muy orgulloso. Hemos tenido que crecer, aprender y dejar los egos fuera para trabajar juntos. Ha sido una experiencia muy conmovedora.

Su mantra para momentos difíciles.
“No seas tan duro contigo mismo”. Todos tenemos algo que no nos gusta de nosotros pero hay que esforzarse por llegar al final del día y pensar: “Estoy bien”.